miércoles, 29 de octubre de 2008

No somos culpables, pero sí responsables


La culpa arrastra hacia el propio castigo, e impide que seamos conscientes de las posibilidades de reacción ante nuestro propio error. La culpa no nos deja pensar mas allá del error, encontrar soluciones, o aprender sobre él para no volver a repetirlo.

La culpa paraliza.

Ambos son necesarios, pero en la situación correcta.
La culpa es necesaria para darnos cuenta de que hemos actuado mal, pero no debe ir mas allá, pues entonces aparece la paralización, impidiendo que actuemos de una u otra forma. Cuando tomamos consciencia de que hemos actuado de forma incorrecta, debemos dar paso a al responsabilidad. La culpa ya ha hecho su función, y mas allá de eso no puede más que perjudicar.

FUENTE: http://pensamientosdecaramelo.blogspot.com/

No hay comentarios: